La Policía, tras el rastro de Semprún

“PARIS.- Hace días, ha sido detenido, por las Autoridades alemanas, el súbdito español JORGE SEMPRUN YMAURA, joven de 19 años, que vivía con sus padres, en el pueblo de Saint Prix (Seine et Oise)”. Así empieza el comunicado del servicio policial español, fechado el 10 de noviembre de 1943, sobre la detención de Jorge Semprún y otros dos españoles por la Gestapo, la policía secreta de la Alemania nazi. Pese a los esfuerzos diplomáticos de su padre por liberarle, Semprún fue deportado al campo de Buchenwald, tras un agónico viaje de tres días en un tren de mercancías. En ese momento tenía 20 años.

Tras la liberación de Buchenwald en 1945, Semprún mantuvo su compromiso antifascista y desde el exilio se dedicó íntegramente a luchar contra la dictadura franquista. Al principio su actividad se centró en tareas de propaganda, pero en 1953 los dirigentes del Partido Comunista Español le encomendaron entrar en España y penetrar en los círculos culturales y estudiantiles. Semprún adoptó así la identidad de Jacques Grador, un ingeniero de caminos francés. Fue el primero de muchos viajes y de muchas identidades, y nunca fue capturado por la policía.